Economia de broma

Reprodueixo literalment un article que he trobat en una web econòmica que m'ha confirmat que això de la Borsa no deixa de dependre d'estats d'ànim i de referents absolutament volàtils (m'explico igual que un economista) Vull dir que moltes dades i explicacions tècniques, i a l'hora de la veritat la cosa puja o baixa depenent de coses tant poc palpables com les prespectives o els pressentiments dels experts...

UNA SUBIDA DE BROMA

¿Qué pasó el martes en Wall Street? La memoria es corta y probablemente hoy ya nadie se acuerde de que el pasado 1 de abril los mercados de Estados Unidos abrieron con una importante subida. Todos los índices calentitos en los primeros minutos de negociación, con el Dow subiendo más de 230 puntos y el Nasdaq creciendo más de un 2%. La respuesta no se encuentra ni en los datos macroeconómicos, ni en la Fed, ni en un desayuno cargado de optimismo para los inversores. La decepción será grande, pero es lo que hay. Wall Street subió gracias a una inocentada.

Nunca el día de los inocentes se hizo una broma tan pesada. Como nota al pie para los lectores, el caso Banesto, aunque saltó el 28 de diciembre, no fue una guasa propia del día, por mucho que más de uno, incluido el propio Mario Conde -que reapareció en un programa de variedades en Telecinco el pasado sábado- lo pensaran en su momento.

El mercado de futuros de Estados Unidos se disparó en el Aprils Fools Day -cultura anglosajona- después de que un reputado gestor de fondos bajista, Doug Kass, de Seabreeze Partners Short LP, asegurara en un artículo en The Street.com que había decidido mover sus fondos bajistas al mercado alcista. "Mi nuevo rating del mercado es ahora 10-10".

En el artículo apoyaba su decisión en una serie de consideraciones, tales como que el barril de petróleo iba a bajar hasta los 50 dólares, que esperaba una subida del 26% para el S&P 500 al cierre del año, que la economía americana no iba a entrar en recesión porque el precio de la vivienda estaba a punto de estabilizarse, etc., etc. Sin embargo, lo que parecía una broma para los lectores se convirtió en una bomba de relojería cuando los periodistas financieros se hicieron eco de la noticia.

Bien es sabido que cuando se quiere creer cualquier sombra es fantasma. En Estados Unidos es tal el miedo a la recesión que basta una luz de esperanza para que los inversores y analistas se aferren a ella con fuerza. De esta manera, los presentadores de la CNBC se mostraban exuberantes ante las primeras ganancias y los temores por la crisis de crédito parecían haberse diluido.

Se extiende el entusiasmo en los mercados

Poco a poco la bola de nieve se fue haciendo más grande. Los medios no leyeron entre líneas y asimilaron la información tal cual: "El oso se vuelve alcista", titulaba The Wall Street Journal mientras que CNN Money daba cobertura a la broma como si se tratara de una información real. También Marketwatch, que aseguraba que "los bajistas inician la locura del mercado" y Barron´s abría con "Osos de toda la vida tiran la toalla; el nuevo mercado alcista está frente a nosotros".

Incluso Bloomberg puso en marcha una detallada batería de alertas con los puntos principales del artículo de Kass: "Los datos del papel tóxico (periódicos) en el sistema financiero mundial ha exagerado dramáticamente la relevancia de la situación del crédito"; "Los grandes bancos centrales y los brokers serán un importante factor en el aumento del 25% de los beneficios corporativos"; "Las acciones del sector financiero, que han sido tratadas injustamente por la comunidad bajista el pasado año (monolines, bancos, etc.) pueden doblar su precio a final de 2008". Y suma y sigue. Incluso la caída del precio del crudo hasta 50 dólares.

Lo que está claro es que Doug Kass jamás hubiera pensado que los profesionales de los medios de comunicación iban a pasar por el aro. Por ello, a media mañana -media tarde en el viejo continente- se vio obligado a entonar el mea culpa. "Pido perdón a mis colegas y a mis amigos, y especialmente al SEC, hacia quien profeso un profundo respeto", decía la nota. "Jamás intenté manipular los mercados de esta manera. Sólo intentaba robar una sonrisa a algunos traders que están pasando un mal año".

No obstante, la jugada no le ha salido a Kass del todo mal. En uno de los puntos de su artículo aseguraba que había fichado por la CNBC para conducir un nuevo show después del programa "The Closing Bell". Una idea que ha tenido una gran acogida por parte del director de programación de la cadena, Bill McChesney y, si nada lo remedia, "The Mad Bull" -como lo bautizó Kass- estará en el aire en el mes de junio. ¿Será este el fin de la 'Cramermanía'?

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