13 de des. 2008

Mercenaris a l'Irak


Cinco agentes de Blackwater se entregan por el asesinato de 17 civiles en Irak

Cinco guardias de seguridad de la firma privada Blackwater Worldwide acusados por el Gobierno de EE.UU. de la muerte de 17 civiles en Irak se entregaron hoy en el estado de Utah para ser juzgados, indicaron medios de prensa. Los cinco hombres llegaron a primera hora de la mañana y acompañados de sus abogados a los juzgados, donde les esperaba un enjambre de periodistas, aunque no hicieron declaraciones.

Los guardias, todos ex soldados, fueron formalmente acusados el sábado por el Departamento de Justicia de la matanza ocurrida en septiembre de 2007 en Bagdad, en la que fallecieron 17 civiles iraquíes, mientras que un sexto sospechoso está negociando un arreglo con el Gobierno.

La firma Blackwater sostiene que sus seis empleados dispararon después de ser atacados el 16 de septiembre de 2007 en una intersección de avenidas en la capital iraquí donde había muchos peatones y un intenso tránsito de vehículos.

Sin embargo, una investigación del Gobierno iraquí concluyó que los agentes abrieron fuego contra la multitud sin motivo ni provocación.

Una investigación militar estadounidense también sacó a la luz que los agentes de seguridad fueron los únicos que abrieron fuego, en tanto que Blackwater dijo que su personal actuó en defensa propia.

Este incidente puso en tela de juicio el papel de las empresas de seguridad subcontratadas por el Departamento de Estado de EE.UU. y la presunta inmunidad con que operaban en Irak.

Fuentes allegadas al caso señalaron a los medios de prensa estadounidenses que los mercenarios eligieron entregarse en Salt Lake City, donde vive uno de ellos (Donald Ball), porque allí podrían obtener un jurado más conservador que en Washington.

El diario The Salt Lake Tribune indicó que el abogado Brent Hatch, de esa ciudad, y un equipo legal que representa a los cinco inculpados señalaron que "cualquiera de las jurisdicciones donde viven estos hombres sería un sitio apropiado para el juicio".

Pero Salt Lake City es un sitio práctico porque tiene un aeropuerto internacional con fácil acceso al tribunal federal en el centro de la ciudad, agregó Hatch según el diario.

Blackwater Worldwide es una firma estadounidense que emplea, principalmente, a ex soldados y ex policías, y provee guardaespaldas, vigilantes armados y unidades mercenarias de operaciones tácticas en diversas partes del mundo.

En Irak, aparte de los casi 150.000 soldados estadounidenses, hay más de 125.000 "contratistas privados"
empleados por decenas de firmas y que dan desde apoyo técnico a servicios de cantina, recolección de residuos, custodia de instalaciones, protección de funcionarios y compañía armada para convoyes.
8/12/2008 | EFE